Shang-Chi y la Leyenda de los Diez Anillos: Una historia de origen con mucho corazón
Simu Liu entra al Universo Cinematográfico de Marvel con el pie derecho, al otorgar un personaje protagónico con mucho carisma, en una película de origen competente y dinámica.
ESTA OPINIÓN/REVIEW NO TIENE SPOILERS DE LA PELÍCULA
Las historias de origen son siempre necesarias, aunque lleguen a convertirse en un recurso repetitivo para determinados proyectos. En el caso de Marvel, a lo largo de 13 años, se han introducido una cantidad enorme de personajes en películas con estilos diferentes. Ahora llega el turno de Shang-Chi, un joven destinado a cosas extraordinarias, con base en el linaje de su propia familia.
Simu Liu encarna a este nuevo superhéroe de la casa Marvel en la película 25 del UCM, estrenada en una época complicada en términos sanitarios, por lo cual es muy necesaria. De todas las películas de origen que ha presentado el estudio, Shang-Chi y la Leyenda de los Diez Anillos se sostiene de forma sólida por la narrativa, los escenarios y, sobre todo, la interacción de los protagonistas.
Este filme es una muestra clara de cómo debe ser hecha una historia de origen y, al mismo tiempo, de la introducción de un personaje que irradie carisma con el espectador, desde los primeros minutos de metraje. Simu Liu se gana al público al instante. Excelente elección de casting. Por otro lado, los acompañantes del héroe no se quedan atrás. Awkwafina funciona en un rol de soporte cómico, sin embargo, otorga peso a la historia al momento de ser un vínculo de fortaleza emocional para el protagonista.
Se retoman pasajes ya conocidos del UCM, e introduce una problemática personal entre lo que es correcto y lo que es fácil. En lo que al antagonista se refiere, Tony Leung encarna a un ser ancestral que obtiene un poder inconmensurable para conquistar de forma masiva. Sin embargo, lo que sobresale del personaje es el trauma personal-familiar del pasado que lo atormenta continuamente.
Visualmente, la película es una maravilla, e introduce al espectador a la cultura china de una manera excepcional. Las coreografías están realizadas a la perfección. La banda sonora de Joel P. West se convierte en un acompañante perfecto de lo que sucede en pantalla, y aporta un toque propio de lo que representan Shang-Chi y su entorno.
La comedia está en su justa medida, sin embargo, no todo es perfecto en la vida. Si hay algo que la película omite en este aspecto es el humor en escenas donde no lo necesitan. Existen momentos climáticos donde los chistes no hacen buena pareja, por lo que la secuencia en turno puede no resultar de la forma en que se espera.
En resumen, Shang-Chi y la Leyenda de los Diez Anillos es una sólida película de origen, con un protagonista carismático, y una serie de valores personales que le dan corazón a la narrativa presentada. En términos personales, la mejor película de origen del UCM.
Como recomendación, es crucial quedarse a las escenas post-créditos, específicamente a la primera.
CALIFICACIÓN: 9/10
LO MEJOR: Simu Liu como Shang-Chi, las coreografías, los visuales, el diseño de producción, la banda sonora y el tercer acto de la película. Simplemente espectacular.
LO PEOR: La comedia excesiva en determinados momentos. Te saca del contexto de la escena.